Esta parte del año sirve para que varios traten de salvar la tarjeta en el PGA Tour. Otros buscan meterse entre los puestos 51 y 60 de la FedEx Cup para poder jugar los dos primeros Signature Events de 2026. Otros solo quieren ganar, y este fue el caso de Steven Fisk.
Llegado al circuito a principios de año, proveniente del Korn Ferry Tour, Fisk llegó a Misisipi en el puesto 135 de la FedEx Cup, con un cuarto puesto en Puerto Rico como su mejor actuación. Tres muy buenas rondas lo pusieron en el grupo final, a dos del líder Garrick Higgo. El sudafricano comenzó errando varios greens y salvándose todas las veces, pero los dos bogeys tempranos en el comienzo de los segundos nueve hoyos metieron a muchos en la pelea. Danny Walker jugaba delante del grupo final y, por un momento, también fue líder, pero el final fue un duelo entre los dos del último grupo.
Se recuperó Higgo con tres birdies seguidos a partir del 13 e igualó la posición de Fisk. En el 16 la ventaja era del sudafricano, pero Fisk la embocó desde casi 13 metros para poner presión en su rival. Embocó Higgo y todo siguió empatado. En el 17 pegó Fisk primero al green, dejándola casi dada. La respuesta de Higgo fue brillante y su approach se detuvo a un metro, pero falló el putt y allí Fisk quedó solo al frente.
Un perfecto golpe de salida le dio paso a otro increíble golpe de aproximación que dejó la pelota a un metro. Higgo no respondió de la mejor manera, solo anotó par, y el escenario quedó libre para que Steven Fisk ganara su primer torneo. Tenía dos putts, pero necesitó solo uno para cerrar como lo hacen los grandes jugadores. Ahora la vida cambió: Fisk es ganador y ya no mirará el ranking por un par de años.
