Sin dudas fue una gran semana para nuestros jugadores. Los cuatro que participaron en la 107ª edición del PGA Championship completaron los 72 hoyos, y uno de ellos fue protagonista principal durante las tres primeras jornadas.
Jhonattan Vegas abrió el jueves con 64 golpes y tomó la punta del campeonato. Jugó por la tarde, y eso hizo que su día terminara bien entrada la noche, ya que las obligaciones de un líder de major son muchas y requieren mucho tiempo. Casi no tuvo tiempo de procesar lo hecho cuando ya estaba el viernes temprano en el tee del 1 para comenzar la segunda jornada. Volvió a jugar de maravillas hasta que tropezó con un doble bogey en el hoyo final, que de todas formas lo dejó solo en la cima por dos golpes.
El comienzo del sábado fue nervioso y errático desde el tee, pero Vegas acomodó la ronda y volvió a ponerse en par con cuatro hoyos por jugar. Un muy mal golpe de salida en el 15 y otro bogey en el 18 arruinaron el trabajo del día. Terminó a cinco golpes de Scheffler y los 72 del domingo lo dejaron en el quinto lugar, su mejor actuación en un major. Vegas es un gran jugador, y muchos estaban sorprendidos de que jamás hubiera estado dentro del top 20 de un major. A veces, los grandes campeonatos no tratan bien a todos. Esta experiencia puede abrirle los ojos al venezolano y hacerlo sentir que tiene chances reales de competir en los grandes escenarios. Pocos le pegan a la pelota como él y tienen su potencia, dos atributos fundamentales para sobresalir en este tipo de torneos.
Joaquín Niemann finalmente rompió la racha negativa en los majors: en 24 presentaciones nunca había logrado un top 15, y esta semana en Quail Hollow terminó octavo. Los 74 golpes del primer día lo dejaron en una posición complicada y sin margen de error, pero el chileno respondió con un 67 que lo metió nuevamente en la pelea. Cerró con 68 y se fue contento, además de ganar confianza para el US Open dentro de un mes.
Nicolás Echavarría arrancó muy bien, pero cerró con un doble bogey en el 18 el domingo que le dejó un sabor amargo. Hizo un doble en cada una de sus rondas, lo cual es mucho en cualquier campeonato. Rafa Campos debutó en el PGA Championship y finalizó en el puesto 55, con una ronda final de 76 que incluyó siete bogeys y un doble en el hoyo final. No es fácil acostumbrarse a estos escenarios, y Campos está atravesando sus primeras experiencias.
